El origen de esta
clásica celebración amorosa se remonta a una trágica historia acontecida varios
siglos atrás.
Ya estamos acostumbrados a que el 14 de febrero de cada año se celebre el Día de los Enamorados, tal cual como ocurrirá este domingo. Pero ¿por qué tenemos esa tradición? Crédito: Agencia Uno Me gusta Compartir A 868 personas les gusta esto. Sé el primero de tus amigos.
Si hay varias teorías para esta fecha, la que cobra más
fuerza se remonta hacia el siglo III, en Roma, la cual está basada en una
leyenda que cuenta la emotiva historia de un sacerdote que desafió las órdenes
del emperador romano Claudius Aurelius Marcus Gothicus, Claudio II.
Este había prohibido la celebración de matrimonios para los
jóvenes, debido a que, a su entender, los solteros sin familia y con menos
ataduras eran mejores soldados.
El sacerdote Valentín fue el que consideró que el decreto
era injusto y en secreto celebraba matrimonios para jóvenes enamorados. No
obstante, pagó caro por estos hechos.
Es que sus actos secretos se conocieron y el emperador
Claudio ordenó que se encarcelara a Valentín. Es ahí donde el oficial Asterius,
encargado de encarcelarle, quiso ridiculizarlo y ponerlo a prueba: lo retó a
que devolviese la vista a una hija suya, llamada Julia, que nació ciega.
Valentín aceptó y, en nombre del Señor, le devolvió la vista.
Este hecho estremeció a Asterius y su familia, quienes se
convirtieron al cristianismo. Sin embargo, y de todas formas, Valentín siguió
preso y el emperador Claudio finalmente ordenó que lo martirizaran y ejecutaran
el 14 de febrero del año 270.
La joven Julia, agradecida, en tanto, plantó un almendro de
flores rosadas junto a su tumba. De ahí que el almendro sea símbolo de amor y
amistad duraderos. Y hoy, cientos de años después, se celebra el 14 de febrero
como el Día de los Enamorados, o el de San Valentín como se le conoce en varias
culturas. Además, se ha ampliado y no es solamente en torno a las parejas, sino
que también en base a la amistad.
El día de la fiesta de San Valentín fue declarado por
primera vez alrededor del año 498 por el papa Gelasio I, y durante muchos
siglos también tuvo una connotación religiosa, la cual se perdió, hasta que en
2014, el propio papa Francisco decidió participar de la celebración de San
Valentín, en un intento por devolverle el sentido religioso.
Síguenos en las Redes Sociales